Por: Selene C. (Argentina)

El Camino Inca fue la experiencia de mi vida. Pensé que esta forma de llegar a Machu Picchu iba a ser inolvidable y me quedé corto pues la aventura fue mucho mejor. Cada paso que di fue una experiencia increíble pues estaba rodeado de un paisaje increíble. El tour lo contraté por internet con una agencia que me recomendaron unos amigos americanos. Fui acompañado con mi novia y unos amigos. Paso a contarles como fue día por día esta aventura en Cusco.

Día 1: De Cusco a Huayllabamba

El Camino Inca es la forma más increíble de llegar a Machu Picchu. Los muchachos de la agencia nos recogieron en la puerta del hotel a eso de las cuatro de la mañana. El guía y los demás turistas viajaron con nosotros. Aprovechamos para dormir un poco hasta que llegamos el inicio de la caminata. Nos alistamos, hicimos una barra y entramos a la cancha. Había un poco de nervios pero emocionados de la aventura.

Y comenzamos a caminar. Ascendimos lentamente por tramos más o menos fáciles. Después de unas pocas horas divisamos el sitio inca de Llactapata. El guía que siempre nos acompañó dio detalles sobre este sitio. Después seguimos hasta un campamento donde los porteadores y cocineros nos tenían lista la comida. Ellos, los porteadores y los cocineros, también caminan cargando los utensilios necesarios para la caminata.

Después seguimos caminando por caminos cada vez más altos hasta llegar al campamento de Huayllabamba. Serían las cuatro o cinco de la tarde y ya estábamos un poco cansados, la verdad. La cena consistió en asado de pollo con ensalada y arroz verde. Los campamentos estaban cómodos aunque siempre hay que llevar algo para el frío. Dormimos cansados pero rodeados de n paisaje que hasta ahora tengo muy presente.

• Distancia del día: 13 kilómetros.
• Dificultad: Moderada.
• Más información: El tour incluye entrada al Camino Inca, porteadores, cocineros, los campamentos, el guía de turismo, la entrada a Machu Picchu, el regreso a Cusco en tren y bus y algunos utensilios extras.

Día 2: De Huayllabamba a Pacaymayo

Después de una noche algo fría pero cómoda, nos levantamos muy temprano para reiniciar la caminata. Primero el desayuno que incluyo quinua, una bebida muy dulce y llena de proteínas. La verdad era que necesitábamos mucha energía pues caminamos siempre para arriba por cientos de escaleras hasta llegar al punto más alto el abra Warmiwañusca. ¡El aire nos faltaba por el cansancio, la altura y los paisajes imponentes!

En el campamento de Llulluchapampa fue el almuerzo. Este lugar está antes de llegar al Warmiwañusca así que nos dio muchas energías para seguir caminando. En la ruta el guía nos explicó distintas especies de plantas, árboles y flores que adornan los caminos. Después de llegar lo más alto solo quedaba bajar y bajar por escaleras.

Después de 7 u 8 horas de intensa caminata llegamos al campamento de Pacaymayo, un lugar bello lleno de paisajes de montaña y ríos. Allí nos tenían listo los campamentos, el comedor y todo ordenado. Gracias a los muchachos que nos ayudaron y son imprescindibles para el tour. Dormimos cómodos ya adaptados a la caminata y las montañas.

• Distancia del día: 11 kilómetros.
• Dificultad: Alta.
• Más información: El abra Warmiwañusca está a 4,215 metros sobre el nivel del mar. Es un lugar maravilloso porque todo está lleno de nubes y parece que es imposible llegar más alto. Todos nos tomamos fotos allí. No olviden llevar una casaca cortavientos porque hace frío y corre mucho ventarrón.

Día 3: De Pacaymayo a Phuyupatamarca

El tercer día fue la ruta que más disfruté porque no era difícil e incluyó sitios incas muy interesantes. Después de desayunar, apenas comenzamos, nos encontramos con el sitio arqueológico de Runkurakay. Después seguimos caminando y llegamos al sitio inca de Sayacmarca. El guía nos acompañó siempre y disfrutamos de la historia inca.

Seguimos caminando y comenzó a llover. Sacamos nuestro poncho de lluvia y seguimos felices. Tuvimos que cruzar un túnel inca en medio de la montaña. Casi toda la ruta fue descendente. Es necesario llevar bastones porque se pueden dañar las rodillas. Al final llegamos al campamento de Phuyupatamarca donde, una vez más, todo estaba listo.

Phuyupatamarca era un campamento que está muy cerca de un campamento del mismo nombre. Como llegamos temprano fuimos a visitarlo junto al guía turístico. Ya había parado la lluvia, sin embargo, el lugar estaba lleno de nubes. Todo parecía tan misterioso. Después volvimos para almorzar y, más tarde, cenar. Esa noche los cocineros nos prepararon una torta hermosa. También nos despedimos de los porteadores con propinas. Nos dormimos emocionados por estar tan cerca de Machu Picchu.

• Distancia del día: 7 kilómetros.
• Dificultad: Moderada.
• Más información: Según nos contó el guía para el campamento de la tercera noche hay dos opciones: Wiñayhuayna y Phuyupatamarca. A nosotros nos tocó Phuyupatamarca. Sin embargo, el mejor es Wiñayhuayna. Ese campamento está más cerca de Machu Picchu así que no es necesario levantarse tan temprano para llegar. La cuarta mañana, a nosotros nos tocó levantarnos a las 4 de la mañana.

Día 4: De Phuyupatamarca a Machu Picchu

Y llegó el último día. Nos tocó levantarnos a las 3 de la mañana y alistarnos para la caminata. El desayuno fue escueto pero necesario para tener energías. Tuvimos que usar unas linternas para atravesar los caminos oscuros a esa hora. De madrugada vimos el Wiñayhuayna. Luego de una explicación seguimos por caminos planos hasta, a eso de las 7 de la mañana, llegar a Machu Picchu.

La primera vista de Machu Picchu fue inolvidable. Hacía un sol espléndido así que tomamos fotos increíbles. Ese lugar se llamaba Intipunku y, según nos explicó el guía, era la puerta de ingreso de Machu Picchu que usaron los incas. Después tuvimos que caminar en descenso por casi 1 hora para llegar al sitio arqueológico de Machu Picchu.

Luego de recorrer todo Machu Picchu junto a nuestro guía fuimos a un restaurante ubicado junto a Machu Picchu, el Sanctuary Lodge hotel. Disfrutamos de un rico menú y subimos en bus rumbo al pueblo de Aguas Calientes. En el pueblo fuimos con mis amigos a un bar a tomarnos unas cervezas. A la hora que nos dijo el guía tomamos el tren a la ciudad del Cusco. Llegamos a Cusco a eso de las 7 de la noche. ¡Inolvidable!

• Distancia del día: 8 kilómetros.
• Dificultad: Fácil.
• Más información: No todos los tours al Camino Inca incluyen lo mismo. Según supe, algunos no incluyen almuerzo en el último día. Otros te ofrecen la posibilidad de subir la montaña Huayna Picchu dentro de Machu Picchu. Los tipos de trenes también se pueden cambiar por mejores servicios. La verdad que el tour incluyó lo que esperaba así que no tengo quejas. Infórmense bien y elijan la agencia de turismo que más les convence.